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Martín Vizcarra y el escandaloso entramado de corrupción: sobornos al descubierto

A inicios de noviembre de 2013, la empresa constructora Obrainsa recibió una de las tantas llamadas que ingresaban a su...

A inicios de noviembre de 2013, la empresa constructora Obrainsa recibió una de las tantas llamadas que ingresaban a su central telefónica. Nadie imaginó que fuera de Martín Vizcarra, gobernador regional de Moquegua en ese entonces. Según el expediente fiscal No. 506015507-2020-16-0, pidió hablar con Elard Paul Tejeda Moscoso, gerente comercial de Obrainsa. Le dijo que tenía información que brindarle, agregando que estaba al tanto de las ofertas presentadas a UNOPS (Naciones Unidas de Servicio para Proyectos) para el proyecto de irrigación Lomas de Ilo, al que había postulado la empresa de Tejeda. Precisó que se encontraba en Lima y que “podía acudir a las oficinas de Obrainsa en San Isidro, para coordinar aspectos de la mencionada licitación”.

Las empresas CyM Vizcarra y Obrainsa tenían familiaridad. Trabajaron en el 2003 en la obra Represa de Pillones, Arequipa. En el 2013, el gobierno regional de Moquegua encargó a UNOPS la licitación del proyecto Lomas de Ilo, que ampliaría la frontera agrícola. Con esa modalidad, al ser un organismo internacional, no generaría sospechas. UNOPS convocaba a licitación e informaba a la entidad regional los resultados, pero solo recomendaba, no elegía a la empresa ganadora. Quien decidía, otorgaba la buena pro y firmaba el contrato era, en forma exclusiva, el gobierno regional de Moquegua. O sea, su presidente, Martín Vizcarra. Aunque este, astuto como es, se hizo representar por funcionarios de la región para la rúbrica.

Vizcarra estaba al tanto de todo. Por eso, previa a la llamada telefónica a Tejeda Moscoso ya sabía que UNOPS había pedido a las dos empresas finalistas que hicieran una reducción de presupuesto. Obrainsa no cumplía con los requerimientos técnicos y formó un consorcio con la empresa italiana Astaldi. Ofertó S 86’454,818.06 y San Martín-Invercom, S/ 249’100,628.89.

El día de la llamada, Paul Tejeda se entrevistó con Vizcarra en el directorio de su empresa, quien con descaro y directamente le indica que “su oferta no debía exceder los S/81 millones y que él la aprobaría cuando se la presentara UNOPS. Agregó que la coima era de 2% del costo directo de la obra (S/ 50’810,63.85) equivalente a S/ 1’016,212.76 por “el apoyo brindado”. Con sorna añadió que “en Provías Nacional todas las empresas ganadoras pagaban más del 2%”. El 6 de diciembre de 2013 el Consorcio Obrainsa-Astaldi firmó el contrato con el gobierno regional de Moquegua.

Todo este tinglado de corrupción solo se supo a partir de fines de septiembre de 2020. La colaboración eficaz de Paul Tejeda (Consorcio Obrainsa-Astaldi) jaló el testimonio de José Manuel Hernández, quien relató con detalles cómo fue la coima con ICCGSA, encargada de la remodelación del Hospital de Moquegua. Tardaron siete años para que la verdad salga a la luz. En su declaración fiscal, Vizcarra niega absolutamente todo.

Los desembolsos

El 2 de diciembre de 2013, previo a la firma del contrato, Vizcarra llama a Paul Tejeda Moscoso “solicitándole que le alquile un avión pequeño porque tenía urgencia de reunirse con unas personas que se encontraban en Lima” y quería trasladarlas a Ilo por el día. “A cuenta de lo pactado”, dijo. Se alquiló una aeronave turbo hélice por S/ 35,985.64. En la lista de pasajeros que obtuvo la Fiscalía, firmada por Martín Vizcarra, está Luis Arce Catacora, actual presidente de Bolivia.

La obra Lomas de Ilo se inicia alrededor del 20 de enero de 2014. A los pocos días Vizcarra ya se estaba comunicando con Paul Tejeda Moscoso para pedirle más dinero. Este recuerda que le dijo que “atendiera con lo acordado y que tenía necesidad de hacer unos pagos”. Añadió que sabía que el gobierno regional ya le había hecho un adelanto.

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La empresa Astaldi se opuso a este pago porque no había “sustento administrativo para la salida del dinero”. Obrainsa tuvo que hacer un préstamo al Consorcio. La coima finalmente salió de un adelanto de dividendos a Tejeda. El cheque del BBVA por S/ 400 mil se hace a nombre del conserje de la empresa, Tobías Puerta Gutiérrez.

La secretaria de Gerencia, Rosa Carmen Ríos Quinteros, vio entrar a Vizcarra muy orondo a la empresa el 27 de enero de 2014. Ingresó a una de las oficinas de Obrainsa, saludó a Tejeda y a otros gerentes quienes luego se retiraron. “En ese momento Tejeda Moscoso le entregó los 400 mil soles en un sobre de manila”.

El tercer y último pago de coima fue entre el 4 y 7 de abril de 2014 por un monto de 600 mil soles. Con la misma modalidad: cheque del BBVA, entrega del dinero a Vizcarra en un sobre de manila y en las oficinas de Obrainsa. Cada cargo en su contra está absolutamente comprobado en el expediente fiscal. Hay correos, llamadas, declaraciones, cheques, etc. Todo está debidamente documentado.

Por Mariella Balbi

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